Si te estás planteando cambiar tu lavadora de toda la vida por una nueva, seguro que estás valorando qué elegir, si una lavadora convencional o una lavadora – secadora. A continuación te explicamos en qué consisten ambos tipos de lavadoras y cuáles son sus respectivas ventajas y desventajas.
En esta época otoñal, en la que las lluvias apenas permiten dejar secar la ropa al aire libre, merece la pena plantearse el hecho de optar por la compra de una lavadora secadora, que aúne ambas funciones del proceso de lavado para ahorrar, entre otras cosas, espacio, tiempo y esfuerzo.
Como todos sabemos, las lavadoras convencionales finalizan con el centrifugado de la ropa, un proceso que permite eliminar la mayor cantidad de agua posible que las prendas habían acumulado a lo largo del lavado. Sin embargo, con este tipo de lavadoras seguimos dependiendo del tendedero de exterior, imposible de utilizar, como decíamos, en días lluviosos (aunque también hemos de decir que la luz del sol perjudica el color de la ropa), o del tendedero de interior que, si no cuenta con una fuente de calor cercana, la ropa tarda días en secarse y, en ambientes húmedos, determinados tipos de tejidos como el algodón pueden acabar cogiendo un desagradable olor por el que casi no merecía la pena ni haberse molestado en lavar la ropa.
Es por ello por lo que algunas personas optan por adquirir una secadora que complemente el trabajo de su lavadora y les permita cuidar su ropa, olvidándose del factor climático. Pero, como todo, incorporar una secadora a la cocina o la zona de lavado de una casa suele ser un problema por cuestiones de espacio, por lo que en muchas situaciones se tiene que descartar esta opción.
Lavadora secadora: Ventajas
Tras haber hecho un breve repaso por las funcionalidades de las lavadoras y de las secadoras, te contamos a continuación en qué consiste el funcionamiento de las lavadoras secadoras y qué ventajas tienen con respecto a las lavadoras y secadoras convencionales, por separado.
Las lavadoras secadoras concentran, en un mismo espacio, ambas funciones de lavado y secado, dejando la ropa en perfectas condiciones para ser utilizada al momento.
Entre sus ventajas destacan:
- Comodidad. Al ser multifunción es más cómodo, pues no hay que estar pendiente de sacar la ropa para tenderla o meterla en la secadora. Hay electrodomésticos de este tipo que se pueden programar para dejar la ropa limpia y lista a la hora que se desee.
- Ahorro de tiempo. Al tener lavado y, a continuación, secado, se acorta el proceso, sin la necesidad de tener que esperar para volver a utilizar la prenda. Además, hay lavadoras secadoras que logran que la ropa salga menos arrugada, lo que permite también ahorrar tiempo de planchado.
- Menor espacio. Un único aparato que realiza las funciones de dos, ocupando el mínimo espacio.
- Multifuncionalidad y versatilidad. Además de lavar y secar en un solo ciclo, las lavadoras secadoras permiten escoger ambas opciones por separado. Sus programas permiten, así mismo, diferentes tipos de lavado y secado, en función de las características de la ropa.
- No afectan las condiciones climáticas. No importa si llueve o hace sol, el resultado siempre será el mismo: ropa seca, cuidada y perfectamente acondicionada para poder ser utilizada en el momento.
- Precio. Por poco presupuesto más que el de una lavadora convencional, puedes adquirir un 2 en 1 con la mayor garantía de satisfacción.
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